El arte, la literatura, la música y el cine han sido, desde siempre, la mejor forma de expresar emociones, sentimientos y pasiones para el ser humano. Compartir el descubrimiento de aquello que nos provoca y nos une como especie, que nos acerca y conmueve, en oportunidades se vuelve una urgencia.
El erotismo, por tanto tiempo considerado una pasión oculta, no ha estado ausente de estas manifestaciones y más de alguna vez ha generado intensos debates en las diversas culturas. De cualquier forma, la necesidad de ver reflejadas nuestras propias pasiones en otros, forma parte de la historia de la humanidad.
El erotismo en el cine
Si bien, como mencionábamos en la introducción, la sexualidad humana ha estado presente en todas las artes, el erotismo en el cine forma parte de los grandes hitos de “destape” de las diversas culturas, pero antes de eso, algunos directores insinuaron, más que mostrar, la sensualidad a través de figuras clásicas de Hollywood.

Audrey Hepburn, Georgine Darcy y Margaret Lockwood fueron sólo algunas de las preferidas de grandes directores como Howard Hawks o el mismo Alfred Hitchcock que pusieron en ellas y sus actuaciones el erotismo latente en la industria. Ya entrada la segunda mitad del siglo XX, los directores fueron más allá y se atrevieron a mostrar abiertamente una nueva faceta del erotismo en el cine.
Algunos clásicos de la pantalla grande
Basta tipear en Google: ‘erotismo en el cine’, para que surjan listados de películas clásicas del género, sin embargo existen algunos títulos que marcaron un hito en la realización de una nueva filmografía que fue reflejando el cambio de las sociedades, su apertura y su necesidad de abandonar la hipocresía imperante sobre un tema que concierne a la humanidad completa. Aquí algunos clásicos.
- El último Tango en Paris. Película realizada en 1972, considerada como una cinta de culto del erotismo en el cine. Fue una co-producción Italo-Francesa, dirigida por Bernardo Bertolucci quien reunió para la ocasión a un reparto estelar que incluyó a María Schneider, Marlon Brando y Catherine Allegret, entre otros. Al año siguiente de su exhibición fue nominada a dos premios de la Academia en categorías Mejor Director para Bertolucci y Mejor Actor para Marlon Brando.
- 9 semanas y 1/2. 1986 fue el año en que esta película obtuvo el reconocimiento del público adulto a nivel mundial. Adrian Lyne tuvo la genial idea de reunir a dos figuras extraordinariamente atractivas para la pantalla grande, Kim Basinger y Mickey Rourkey, quienes dieron vida a un arriesgado guión basado en una extraña relación marcada por juegos sexuales escabrosos. A pesar de que sólo consiguió nominaciones a los Razzie Awards (lo peor del cine), 9 semanas y ½ sigue siendo una película de culto en el género.
- Bajos Instintos. Es quizás la cinta más aclamada de las tres por la participación de Sharon Stone y Michael Douglas en ella. Paul Verhoeven, un ahora septuagenario director neerlandés tuvo con esta película un reconocimiento mayor a partir de 1992, año de realización del filme. Varias nominaciones en distintas categorías al Oscar, la Palma de Oro y el Globo de Oro, avalan a esta cinta película como otra pieza importante del erotismo en el cine.
Si aún no las ves, es el momento de hacerlo. Son clásicos entre los clásicos.